DeepSeek se ha convertido en una de las inteligencias artificiales más comentadas en las últimas semanas. Su ascenso meteórico no solo ha llamado la atención por la calidad de su modelo, equiparable a los de gigantes como OpenAI y Google, sino también por el debate en torno al hardware utilizado en su entrenamiento y el costo real de su desarrollo.
Uno de los aspectos más intrigantes de esta IA es su modelo de financiación y la posible participación del Gobierno chino en su crecimiento. Hasta ahora, DeepSeek ha sido presentada como un proyecto independiente, pero su rápida expansión ha despertado interrogantes sobre el origen de sus recursos y su sostenibilidad económica.
El rol de High-Flyer y la financiación de DeepSeek
DeepSeek es desarrollada por High-Flyer, un fondo de cobertura cuantitativo especializado en trading algorítmico. En términos simples, esta empresa utiliza modelos matemáticos y algoritmos avanzados para realizar inversiones con alta precisión. DeepSeek nació como un proyecto secundario dentro de High-Flyer, aprovechando su capacidad computacional para incursionar en el sector de la IA.
Hasta la fecha, no hay evidencia de que DeepSeek haya recibido financiamiento directo del Gobierno chino. Sin embargo, su impacto dentro del ecosistema tecnológico de China y su rápida consolidación como un referente nacional en inteligencia artificial abren la posibilidad de que en el futuro pueda recibir algún tipo de respaldo estatal.
Un modelo gratuito con potencial de monetización
Por ahora, DeepSeek se ofrece de manera gratuita, lo que genera dudas sobre su modelo de rentabilidad a largo plazo. High-Flyer no obtiene ingresos directos de su IA, sino que financia sus operaciones con los beneficios derivados de su actividad en el mercado financiero. No obstante, como ocurre con muchas empresas de tecnología, la monetización podría venir a través de su API, permitiendo a empresas y desarrolladores acceder a sus modelos mediante pagos por uso.
A medida que DeepSeek continúa ganando relevancia, será clave observar su evolución financiera y si su independencia económica se mantiene o si en el futuro aparece algún tipo de apoyo gubernamental. Por ahora, sigue siendo un jugador disruptivo en la carrera por la inteligencia artificial, con un modelo que desafía a los líderes del sector.
