En el marco del Día Mundial del Suelo, entidades del agro resaltaron la importancia de conservar la salud de este recurso fundamental. Fertilizar AC advirtió que más del 60% de los nutrientes extraídos por los cultivos no se reponen y pidió reforzar las prácticas de manejo sostenible para garantizar la productividad y la seguridad alimentaria.
Cada 5 de diciembre, desde 2014, el mundo celebra el Día Mundial del Suelo, una fecha promovida por la ONU y la FAO con el propósito de visibilizar la necesidad de proteger este recurso esencial para la vida. En apenas unos centímetros de suelo fértil se produce el 95% de los alimentos, y en una sola cucharada pueden habitar más organismos vivos que personas en el planeta.
En este contexto, Fertilizar Asociación Civil (AC) renovó su llamado a promover una nutrición responsable del suelo y recordó que su salud está directamente vinculada a la de los ecosistemas y las personas. La entidad destacó el rol clave de la materia orgánica, que mejora la estructura, retención de agua y capacidad de liberar nutrientes de forma sostenida. Sin embargo, alertó que ciertos manejos, como el déficit crónico de fertilización, pueden deteriorar este componente vital.
“Promovemos decisiones agronómicas responsables basadas en análisis de suelo y en las 4C del manejo nutricional: aplicar los nutrientes en el momento, dosis, forma y lugar correctos”, señaló María Fernanda González Sanjuan, gerente ejecutiva de Fertilizar AC. Añadió que preservar la calidad del suelo es más eficiente que intentar recuperarlo una vez degradado.
Los datos recientes de la campaña 2024/25 muestran una tendencia preocupante: cerca del 60% de los nutrientes extraídos por los principales cultivos no se reponen, lo que amenaza la productividad y la sostenibilidad agrícola a largo plazo. “Devolverle al suelo lo que nos brinda es indispensable para mantener su capacidad de alimentar a las generaciones futuras”, afirmó Esteban Ciarlo, coordinador técnico de la entidad.
Por su parte, la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) compartió una serie de prácticas para fortalecer la presencia de carbono en el suelo, entre ellas la siembra directa, la incorporación de gramíneas en la rotación, el uso de cultivos de servicio y una nutrición balanceada.
En el Día Mundial del Suelo, las organizaciones coincidieron en que cuidar este recurso no es solo una demanda ambiental, sino una estrategia imprescindible para la estabilidad productiva y la seguridad alimentaria.