El Gobierno nacional puso en marcha un programa de incentivos para reducir el consumo eléctrico en verano, con el objetivo de evitar cortes de luz en los momentos de mayor demanda. La medida compensará económicamente a industrias y grandes comercios que disminuyan voluntariamente el uso de electricidad durante los picos de consumo.
La iniciativa quedó oficializada a través de la Resolución 379/2025 publicada en el Boletín Oficial, que creó el Programa de Gestión de Demanda de Energía. Estará dirigido a los Grandes Usuarios Mayores (GUMA), Grandes Usuarios Menores (GUME) y Grandes Usuarios de las Distribuidoras (GUDIS) del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM).
Para adherir, las empresas deberán contar con una demanda de potencia superior a 300 kW y disponer de un sistema de medición que registre su consumo por hora. A cambio, recibirán un pago proporcional a la energía no utilizada, que se contabilizará como una reserva adicional del sistema eléctrico en momentos críticos.
Según el texto oficial, el plan busca “generar señales económicas que incentiven la eficiencia energética y mejoren la calidad del servicio en el SADI (Sistema Argentino de Interconexión)”. El Gobierno recordó que programas similares tuvieron éxito en Estados Unidos, Reino Unido y otros países, alentarando la reducción voluntaria de la demanda en horarios pico.
La administración de Javier Milei pretende así aplanar el consumo estacional y evitar apagones masivos, mientras avanza en la búsqueda de financiamiento para ampliar las redes de alta tensión, obras que demandarán alrededor de US$6.500 millones y cuyos costos planea trasladar a las tarifas de los usuarios.