Mapei, empresa global de productos químicos para la construcción, marcó un hito ambiental en Argentina al adquirir 300.000 créditos de carbono del Proyecto REDD+ Selva de Urundel, una iniciativa certificada que preserva 50.000 hectáreas de bosque nativo en Salta y evita millones de toneladas de emisiones.
El sector de la construcción, responsable de alrededor del 38% de las emisiones globales de CO₂ según el Global Alliance for Buildings and Construction, dio un paso significativo hacia la sostenibilidad con la decisión de Mapei de compensar de manera directa su huella ambiental en Argentina. La compañía adquirió 300.000 créditos de carbono dentro del Proyecto REDD+ Selva de Urundel, ubicado en el departamento de Orán, Salta.
El proyecto, certificado bajo los estándares internacionales VCS y CCB, protege unas 50.000 hectáreas de selva y busca evitar la emisión de 9,6 millones de toneladas de CO₂ equivalente durante 30 años. Además de reducir la deforestación, la iniciativa impulsa la conservación de especies emblemáticas como el yaguareté, el tapir y el águila poma, mientras promueve la inclusión social a través de empleo verde, educación ambiental y capacitación comunitaria.
La inversión de Mapei también dinamiza la economía regional mediante infraestructura, monitoreo satelital y prácticas agroforestales sostenibles, configurando un modelo de economía circular que reinvierte los recursos en la propia comunidad. La empresa suma esta iniciativa a su trayectoria internacional de compensación de emisiones en proyectos de energía renovable y conservación forestal desde 2012.
La Selva de Urundel, primer proyecto REDD+ argentino certificado bajo estándares globales, posiciona al país como referente en soluciones basadas en la naturaleza. Para el sector productivo, representa un camino claro hacia la neutralidad de carbono y un ejemplo replicable para otras compañías que buscan fortalecer su compromiso ambiental.