La decisión de excluir a determinadas categorías de la segunda campaña de vacunación contra la fiebre aftosa recibió el respaldo de una voz de peso en el ámbito sanitario. Luis Osvaldo Barcos, expresidente del Senasa y ex representante regional de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), calificó la medida como un “avance sanitario” acorde a la situación epidemiológica que atraviesa el país.
“La veo bien porque es un avance. La situación sanitaria de la Argentina es muy buena, también la de los países vecinos. Es un acercamiento con medidas progresivas porque la situación lo permite”, afirmó Barcos en diálogo con Valor Agro Radio (LT7).
El especialista explicó que los animales exceptuados de la segunda dosis ya cuentan con una cobertura inmunológica sólida, producto de las múltiples aplicaciones recibidas en su vida productiva, lo que reduce significativamente el riesgo. “Me parece adecuada la decisión, porque el riesgo es muy bajo”, señaló.
Barcos advirtió, sin embargo, que la flexibilización no debe interpretarse como un hecho aislado, sino como parte de un plan sanitario integral y progresivo: “Senasa trabaja con equipos epidemiológicos serios y seguramente vendrán otras acciones en el futuro”, sostuvo.
En cuanto a la posibilidad de que Argentina avance hacia el estatus de país libre de fiebre aftosa sin vacunación, fue cauto: “Hay que cambiar ciertos paradigmas, pero las vacunas cumplen un rol fundamental en la prevención de enfermedades y en evitar pérdidas. No hay que cerrarse en decir que hay que dejar de vacunar”.
Finalmente, envió un mensaje a quienes analizan la medida desde un enfoque económico: “En sanidad no hay que medir los costos, hay que prevenir y hacer las cosas bien. Cuando se pone costo se embarra la cancha. Que los economistas hablen de costos, pero que no se metan en salud”.