Casi 1,4 millones de turistas se movieron por la Argentina durante el último fin de semana largo del año, generando un gasto total de $249.370 millones. Según CAME, la movilidad creció 43,5% frente al mismo feriado de 2023 y volvió a impulsar a las economías regionales, pese al clima inestable y a estadías más cortas.
El fin de semana largo por el Día de la Inmaculada Concepción dejó un balance positivo para el turismo argentino. De acuerdo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), 1.377.810 turistas viajaron por el país, un 43,5% más que en el mismo feriado de 2023.
La estadía promedio fue de dos noches, por debajo de las 2,6 de 2023, en un contexto de menor poder adquisitivo que impulsa escapadas más breves y cercanas. Aun así, el gasto diario promedio subió 8,8% en términos reales y se ubicó en $90.495 por persona. En total, el movimiento alcanzó $249.370 millones, lo que representa un incremento real del 20,1% interanual.
Entre los destinos más concurridos se destacaron CABA, Mar del Plata, Córdoba, Puerto Iguazú, Mendoza y Ushuaia, además de las ciudades con fuerte turismo religioso como Salta, Tucumán, Jujuy y Corrientes.
En el balance anual, los ocho fines de semana largos de 2025 movilizaron 13,3 millones de turistas y generaron un impacto económico estimado en $2,97 billones (US$ 2.030 millones), consolidando a los feriados como un motor clave para las pymes y las economías regionales.