Con más de 6,6 millones de hectáreas sembradas de trigo, los productores refuerzan la reposición de nutrientes en los suelos. El aumento se refleja tanto en el uso local como en las importaciones de fertilizantes, consolidando una tendencia positiva para la campaña agrícola 2025.
El consumo de fertilizantes en Argentina registró un crecimiento significativo durante el primer semestre de 2025. Según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, el uso de estos insumos aumentó en 12.500 toneladas respecto al mismo período de 2024, impulsado por la siembra de 6,6 millones de hectáreas de trigo.
El incremento responde a la decisión de los productores de reponer nutrientes en los suelos, con el objetivo de sostener y mejorar los rindes, así como la calidad de los cultivos. Esta dinámica también se ve reflejada en las importaciones: hasta junio ingresaron al país 770 mil toneladas de fertilizantes nitrogenados, fosfatados y otras mezclas, lo que implica un aumento interanual del 17,5%.
Dentro de los fertilizantes fosfatados, la roca fosfórica —materia prima esencial para la elaboración de mezclas como el Super Fosfato Triple (SPT)— también mostró un repunte. Su consumo alcanzó 23,3 mil toneladas, un 21,2% más que en 2024.
La Dirección Nacional de Agricultura (DNA) informó que en las últimas semanas se registraron fertilizaciones en diversas delegaciones trigueras, favorecidas por las lluvias que aportaron buena humedad en los lotes. De cara al cierre del año, se proyecta que la demanda de fertilizantes para la cosecha gruesa podría crecer otro 8% hacia finales de 2025.