La provincia de Chaco, conocida por su riqueza natural, se ha posicionado como un referente en la producción de pacú arrocero, una especie nativa de alto valor comercial. Este modelo de cría combina la piscicultura con los cultivos de arroz, aprovechando de manera eficiente los recursos hídricos y promoviendo prácticas sostenibles.
En este sistema, los peces son criados en los mismos estanques donde se cultiva arroz, lo que genera un beneficio mutuo: el pacú contribuye al control de plagas y fertilización del arroz mediante sus excrementos, mientras que el entorno acuático de los arrozales proporciona un hábitat ideal para su crecimiento. Este enfoque no solo incrementa la productividad, sino que también reduce el uso de agroquímicos, promoviendo un impacto ambiental mínimo.
El pacú criado bajo este sistema ha captado la atención del mercado internacional, particularmente en Estados Unidos, donde su carne magra y sabor distintivo son altamente valorados. Exportadores chaqueños han comenzado a abrirse paso en este mercado, cumpliendo con rigurosos estándares de calidad e inocuidad alimentaria que les permiten competir con productos de otras regiones.
Con un modelo productivo innovador y sostenible, el pacú arrocero no solo refuerza la economía local, sino que también posiciona a Chaco como un actor clave en la exportación de productos acuícolas hacia mercados de alto consumo, como el estadounidense. Este éxito refleja el potencial de la agroindustria chaqueña y el compromiso con prácticas que equilibran desarrollo económico y cuidado ambiental.