A medida que crecen las expectativas por el gobierno pro-bitcoin de Donald Trump, las perspectivas en Europa apuntan a un enfoque diferente con el euro digital. El Banco Central Europeo (BCE) ha dado un paso importante en el diseño de esta moneda digital de banco central (CBDC), publicando el 2 de diciembre su segundo informe sobre la fase de preparación del euro digital. Este proyecto busca interactuar con usuarios y recopilar datos para definir las decisiones clave sobre la CBDC en 2025.
Mientras tanto, la atención de los bancos se desplaza hacia la tokenización de activos, con un creciente interés en sistemas de pago instantáneo como FedNow en EE. UU. Un informe reciente del Foro Oficial de Instituciones Monetarias y Financieras (OMFIF) reveló que solo el 13% de los bancos centrales ve a las CBDC como la solución más prometedora para los pagos globales, un porcentaje considerablemente menor al de 2023.
Con la disminución del interés por las CBDC, los bancos se están enfocando en soluciones más prácticas como la tokenización y los pagos instantáneos. Este cambio de rumbo podría llevar a una convergencia con el ecosistema de criptomonedas, especialmente en un contexto pro-bitcoin como el que se avecina en EE. UU., donde firmas como McKinsey proyectan que el mercado tokenizado podría alcanzar los 2 billones de dólares para 2030.