A orillas del río Coronda, Puerto Gaboto invita a descubrir la esencia del litoral santafesino: historia viva, paisajes ribereños y una gastronomía que combina tradición pesquera y productos regionales. Entre aromas de río y legado jesuítico, el pueblo se consolida como un destino cultural y gastronómico imperdible.
Fundado en 1527, Puerto Gaboto tiene el orgullo de ser el primer asentamiento español en territorio argentino. Allí se levantó el Fuerte Sancti Spíritu, testigo de los primeros contactos entre europeos y pueblos originarios. Hoy, ese pasado se revive en el Museo del Fuerte, en los restos arqueológicos y en las celebraciones locales que mantienen viva la memoria histórica.
El paisaje costero, atravesado por islas, lagunas y brazos de río, ofrece un entorno ideal para el descanso, la pesca y el turismo de naturaleza. Los visitantes pueden recorrer senderos entre sauces y ceibos, embarcarse en paseos náuticos o simplemente disfrutar de las vistas del Coronda al atardecer, cuando el cielo y el agua se funden en tonos dorados.
La gastronomía local es otro de los grandes atractivos. El dorado, el surubí y el patí son protagonistas de platos típicos como el pescado a la parrilla o en empanadas, acompañados por mandioca, batata y vinos de la región. Los pequeños emprendimientos familiares y las ferias de productores suman un toque artesanal que refuerza la identidad gastronómica del litoral.
Puerto Gaboto no solo guarda historia: la transforma en experiencia. Entre el sabor del río y la calidez de su gente, este rincón santafesino representa la esencia viva del litoral argentino.
